“Cada noche mi madre apagaba el quinqué, porque en aquel tiempo no había luz, y nos tejía historias, nunca las repetía; nos contaba historias que nos hacían viajar a cuevas, al mar, al cielo, con gigantes. Tuvo la magia para contarnos y aunque a los 11 años dejé mi pueblo, ese mundo de fantasías me acompañó siempre y ahora lo transmito en talleres; por primera vez lo hago con adultos mayores”, relató Reina Marentes.

La escritora yucateca, originaria de Dzidzantún, compartió con Tiempo de Niños parte de su historia y la importancia del lazo que hay entre los abuelos, las abuelas con sus nietos y nietas, por lo que el taller “Tejiendo afectos, abuelos lectores y cuenta cuentos”, busca “sacudir” la imaginación, la creatividad, los recuerdos de niños y que los adultos mayores sean los escritores y cuenta cuenteros de sus fantasías para compartirlos con sus nietos.

El taller se realiza todos los lunes en la Biblioteca Central Manuel Cepeda Peraza, desde el 13 y hasta el 15 de junio, es gratuito y los participantes formarán parte del programa de actividades de la FILEY, ya que contarán un cuento para todos los niños.

La experiencia de la escritora y sus vivencias se combinan con la sensibilidad de los participantes, las experiencias como abuelos y el niño interior de cada uno que sigue latente.

“Fue en Tijuana, cuando estudiaba, que preguntó la maestra qué queríamos ser de grandes y aunque mi respuesta iba entre ser panadera como mi papá o ama de casa comí mi mamá, de mi boca salió: escritora y eso me permitió seguir soñando, porque la niña que llevo dentro nunca se fue y es lo que busco transmitir”.

El mundo son los niños

La escritora enfatizó la importancia de los niños, ya que el mundo son ellos, y las palabras son la clave para su desarrollo, ya que sin ellas no hay nada y esas palabras son las que le dan vida al cuento.

“Busco transmitir en talleres lo que se, lo que he vivido y siempre había trabajado con jóvenes, ahora es la primera vez que lo hago con los adultos mayores, para mí es un reto y me da mucho gusto, busco diferentes estrategias para que juntos lleguemos a la FILEY, en Mayo, donde llegaremos al corazón de los niños con un cuento en el que participaremos todos, será escenificado, aquí se trata de diversión y de aprender”.

Sin obligar 

La escritora resaltó la importancia que los niños lean, se acerquen a los libros, pero enfatizó que nunca debe ser una obligación para los hijos, ya que eso los aleja.

“La lectura debe empezar con los papás, cuando los hijos vean a los papás leyendo, preguntarán qué hacen y eso fomenta su curiosidad, porque si les responden que leen sobre historias maravillosas, ellos querrán leerlo también.

“No se debe imponer, porque lo van a odiar, lo mismo al ir a la biblioteca o librería, debe ser por gusto, en la tranquilidad de casa, los niños harán lo que ven en casa, si los papás están en la computadora, ellos imitarán, si están en el celular, lo harán, si hacen deporte lo harán, los papás son la clave”.

Con 6 hermanos y muchas historias por contar, la escritora invitó a los abuelos a sumarse al taller, a participar una vez a la semana y fomentar con historias a sus nietos a acercarse a la lectura.

A tomar en cuenta

Qué: “Curso Tejiendo afectos: abuelos lectores y cuentacuentos” 

Dónde: Biblioteca central Manuel Cepeda Peraza 

Cuándo: todos los lunes a partir del 13 de enero y hasta el 15 de junio.

Horario: 10 a 12 del día 

Entrada Libre

Registro en el 9-23-21-77

Soy Verónica Martínez, periodista, madre y emprendedora.