Si a los adultos nos dan una hoja en blanco y nos piden cerrar los ojos para recordar lo que decimos y hacemos a los niños cuando estamos molestos; se dibujarán en la mente frases y actitudes que al decirlas en voz alta arrugarían la hoja poco a poco.
Esa hoja es la autoesima de los niños, y hay hojas que terminan en forma de bolita, arrugadas y otras más rotas, que en algunos caso se desarrugan o pegan con cinta si nos disculpamos con ellos, pero van dejando marcas.
El PROBLEMA es que los niños crecen inseguros, no confían en lo que sienten, no se aceptan, no se valoran, les cuesta relacionarse, decidir, se les dificulta aprender, tienen depresión, entre otros.
Así nos lo explicó Ixchel Martín, maestra en inteligencia emocional de Equinox, innovaciones educativas, quien dimensionó que la autoestima es un pilar en la educación y significa lo que pensamos de nosotros mismos, determina si estamos satisfechos con lo que somos.
Y la autoestima, se aprende principalmente en la primera infancia, por eso es importante fomentarla, así que nos compartió algunos TIPS.
PRIMERO cuidar nuestra propia autoestima como adultos, para poder dar lo que tenemos.
DESPUÉS darles el amor incondicional, no por lo que hacen, sino por quienes son, sin comparar.
Tratarlos con respeto y cariño; poner límites, pero sin gritos o insultos, sin DESCALIFICARLOS, validando sus emociones.
Convencerlos de que son capaces de lograrlo, que pueden hacerlo.
Y hacerles ver que son útiles, importantes y contribuyen.
Tratarlos con respeto y cariño; poner límites, pero sin gritos o insultos, sin descalificarlos, validando sus emociones.
Convencerlos de que son capaces de lograrlo, que pueden hacerlo.
Y hacerles ver que son útiles, importantes y contribuyen.
SOBRETODO controlando la forma de tratarlos; respirar 10 veces antes de lanzar los gritos, descalificativos, castigos, insultos y agacharse a su altura, ojos con ojos para explicar o poner límites.
Beneficios
Los beneficios de fomentar el amor propio, la autoestima derivará en personas seguras, que se valoran, que tendrán relaciones sanas, con dignidad, de buen trato.
Y se reflejará en niños seguros, que se aceptan, confían en sus emociones, se saben valorar, son creativos, que saben afrontar.
“La labor es POTENCIARLOS día a día para que se fortalezca su autoestima ¿cómo?, con lo que ve, escucha y lo que se les dice, porque su autoestima se crea con base en lo que les decimos y la forma de decirlo, porque siempre hay dos caras en la misma moneda, ya sea que veamos lo negativo y explotemos con un: -¡ay que torpe!- o busquemos
la parte positiva diciéndoles: -tú puedes hacerlo, vamos a intentarlo-“.
Soy Verónica Martínez, periodista y madre