Si este inicio de Año Nuevo decidiste ponerle un alto a la “Barriguita en Crecimiento” de tus hijos, provocada por tanto dulce, comida chatarra y refrescos, ¡FELICIDADES! te interesará mucho tener a la mano esta lista de alimentos que pueden ser muy dañinos si se consumen con una frecuencia mayor a una vez por semana. NO ES BROMA.
La experta en Nutrición Infantil, Laura Alcocer, nos comentó que emergencias médicas como los infartos o la diabetes, comienzan a desarrollarse desde la niñez por el consumo cotidiano de alimentos como:
- Chocolate. Ocasiona estreñimiento debido a sus altos niveles de grasa.
- Bebidas refrescantes con cafeína y té negro. Su consumo excesivo elimina el calcio que los niños requieren para fortalecer sus huesos y crecer de manera adecuada. Además, de que alteran el sistema nervioso.
- Refrescos y jugos industrializados, por su alto nivel de azúcar aumentan la probabilidad de generar Diabetes tipo 2 a mediano o corto plazo, es decir, en menos de cinco años. Recuerda que la Diabetes tipo 2 desencadena problemas en los riñones, corazón y visión.
- Galletas y dulces. Su tamaño puede hacerlos parecer inofensivos pero tienen altos niveles de grasas y azúcares. Las galletas sin azúcar contienen mayor cantidad de grasas.
- Bebidas energéticas. Contienen una cantidad elevada de sales que el riñón infantil no puede tolerar y podrían provocar: desconcentración, taquicardia e hipertensión.
- Comida prefabricada (para calentar en microondas o la comida rápida), para su elaboración, se utilizan altas cantidades de grasas saturadas que poco a poco van obstruyendo el paso de la sangre en las arterias, lo cual, es un condicionante de los infartos en adultos.
- Yogurth para niños con azúcar añadida. Son mortales para los dientes.
- Embutidos (salchichas, jamón, etc.), sus compuestos como nitratos y nitritos están relacionados con el desarrollo de cáncer.
La Nutrióloga, que además es directora del servicio de alimentos saludables Nutribreak.Mérdia, nos comenta que para que los niños sigan buenos hábitos alimenticios, es necesario que como adultos, seamos conscientes de lo que comemos frente a nuestros chicos, porque de nada valen mil recomendaciones, si en la práctica, nadie las sigue.
Este inicio de Año Nuevo, esperamos que las “Barriguitas en Crecimiento”, sólo estén llenas de felicidad, amor y salud.
Soy Eduardo Álvarez, papá y periodista