“¿Mamá se acabaron las vacaciones? ¿ya voy a ir a la escuela?”
Explicarle a nuestros hijos lo que pasará a partir del 24 de agosto, es el primer paso para que asimilen que ya se acabaron las vacaciones, y que sí regresarán a clases, pero desde casa, con conexiones en alguna plataforma o con los programas educativos de la SEP por televisión.
El aprendizaje de nuestros hijos necesitará de nuestro respaldo como padres, del compromiso de los maestros y del entendimiento de nuestros pequeños a que nuestra vida aún no regresa a la normalidad.
Sin duda, la enseñanza desde la distancia seguirá mermando la socialización de nuestros hijos, pero como padres podemos contribuir a fortalecer otras áreas, como lo es la educación escolar y acompañarlos de cerca en el aprendizaje, que en muchos casos, la vida cotidiana nos lo impedía.
Iniciaremos un ciclo escolar en línea o a distancia, regresaremos a los horarios de conexiones, como lo vivimos de abril a junio del ciclo pasado; el reto es mejorar la dinámica sin caer en el estrés y acoplar los horarios de escuela con el trabajo profesional como papás.
La recomendación para quienes cambiaron de escuela o comienzan la primaria o secundaria, es apoyarlos doblemente.
Adecuar el espacio de la casa para los tiempos educativos e involucrarlos, ayudará a que sean partícipes y asimilen que dejamos atrás el Verano.
Si en casa hay un espacio acondicionado para el trabajo de los papás, también es posible adecuar un espacio para ellos, ordenar los materiales, libretas y lo que se pueda reutilizar.
Será una fase a distancia y cuando haya semáforo verde, regresaremos paulatinamente a los salones; será la mitad de alumnos y por días específicos.
En principio, arranquemos con lo más seguro: desde casa.
Soy Verónica Martínez, periodista, madre y emprendedora