Una conducta general, que refleja la tolerancia, la madurez, incluso el nivel educativo, es obligar a nuestros hijos a compartir, no importa si es su juguete o una rama que encontró en el parque, NO IMPORTA, nosotros queremos que lo comparta en el momento en que “los otros niños” (hermanos, primos, amigos o desconocidos) lo quieren.
Y es que, para ser honestos, somos tan “bien educados” que no podemos permitir que nuestro hijo (el reflejo de nuestros hábitos en casa) nos deje en ridículo, y por esa razón lo tachamos de incivilizado, egoísta, grosero y poco sociable, asegurándole: “nadie va a querer jugar contigo”.
Curiosamente, ese comportamiento que le exigimos a nuestro hijo, no es nuestra forma de actuar, por ejemplo, qué ocurriría si alguna persona cercana o extraña, encontrase nuestras pertenencias más valiosas y al pedirlas prestadas, les digamos con una sonrisa: “Claro que sí, a mí me encanta compartir”.
El especialista suizo en conducta infantil, Ernst Fehr, investigador de la universidad de Zurich, encontró un dato que nos puede ayudar un poco para ser menos exigentes al momento de compartir.
De acuerdo con el estudio que se aplicó a 229 niños con edades entre los 3 y los 8 años, se detectó que:
- mientras más jóvenes son (3 y 4 años), son más egoístas.
- cuando son mayores (7 y 8 años), son más solidarios y equitativos.
En palabras más claras: mientras más pequeños son, tienen menos capacidad y menos interés para compartir los juguetes.
Los turnos parecen mejor opción, pero ¿Cuánto debe durar un turno?
Como adultos, acostumbrados a ser equitativos, el que nuestros hijos retengan los juguetes por mucho tiempo (cuando otros niños alrededor lo codician) puede egoísta, sin embargo, la socióloga y antropóloga, Heathet Sumaker, autora de libros de educación infantil, dice que los turnos largos se deben respetar tanto como los turnos cortos.
De acuerdo con la autora, el niño toma un Turno Largo con el Juguete para satisfacer una necesidad, que puede ser:
- Movimiento. Motricidad gruesa.
- Confianza. Necesitan saber si se les permite, por parte de los padres, tener el juguete y entender el sistema de juego con otros niños. Generalmente lo hacen cuando son más chicos.
- Control. Puede ser una forma de sentirse seguro. Es la manera en que comprueban y demuestran su fuerza y el control que pueden tener en sus vidas.
- Explorar por Interés. Para practicar nuevas habilidades o investigar algo que es nuevo para ellos. Necesitan tiempo y muchas repeticiones. Desarrollan capacidad de concentración y atención. Tiene un alto nivel de aprendizaje y trabajo.
¿Por qué quitarles el juguete?
La autora, también comenta que cuando los forzamos a compartir, el niño aprende que compartir no es agradable. En realidad, el que está compartiendo en esta situación es el papá, muy curioso, porque en el mundo de los adultos, lo que se espera es que todos seamos pacientes y esperemos nuestro TURNO.
Otra investigadora, Nancy Eisenberg, especialista en Desarrollo Social Infantil, dice que cuando se obliga a compartir se crea un círculo vicioso, porque:
- el niño aprende que si quiere un juguete que tenga otro niño, debe llorar o hacer un berrinche.
- el niño que tiene el juguete aprende que compartir no es algo amable, sino obligatorio, frustraste, y además les genera resentimiento hacia el otro niño.
- Se le crea al niño, la idea de que para ser feliz, se tiene que ceder sin protestar, ante el berrinche de otro.
¿Cómo compartir de manera justa? Lista de Espera y Turnos largos
De acuerdo con Heathet Sumaker, los Turnos Largos traen buenos beneficios para los niños, ya que, desarrollan más habilidades para la vida y la generosidad, además de: tolerancia y lidiar con las emociones negativas.
Y el niño que tiene el Turno Largo, puede aprender, si se le explica, cómo sus acciones afectan a otros.
¿cuÁnto debe durar un turno fuera de casa?
Las reglas de los Turnos se deben adaptar, porque en un lugar lleno de niños, como una fiesta infantil en donde te encuentras niños y familias que no conoces y que seguramente tienen ideas contrarias, los turnos largos necesitan modificaciones, y siempre es importante que tus hijos lo sepan, básicamente, te recomendamos tres opciones que le puede decir:
- Los juegos y juguetes son para todos.
- Los turnos deben ser rápidos.
- Si un niño quiere y trata de arrebatar el juguete que tienes, invítalo a jugar en equipo.
COMPARTIR puede ser la PUERTA a un mundo de mayor diversión y más amigos para nuestros hijos, o la PUERTA para el resentimiento y el egoísmo, TODO DEPENDE del enfoque que les mostremos, nosotros te recomendamos el de la Cortesía, Generosidad y Trabajo en Equipo.
¿Tú qué opinas?