“Los niños tienen mucho conocimiento del entorno, cada día aprenden bastante, pero no tienen espacio para explicarlo o desahogarlo, por eso desarrollamos este libro: Un Día una Página, en donde los niños puedan expresar, explorar y entender ¿por qué siento lo que siento? ¿por qué digo lo que digo? ¿por qué hago lo que hago?”
En Tiempo de Niños, este libro nos impactó, porque le habla a los niños desde las emociones y tiene una estructura para que los peques tengan la libertad y seguridad de escribir, lo cual, no resulta sencillo para la mayoría de los chicos (y de hecho, tampoco para los mayores)
Carlos Lucio, autor del libro y director de la editorial Materiales Recreativos, nos explicó que “este libro es una estrategia para que suelten un poco el celular y vuelvan a escribir, que puedan expresar lo que están sintiendo, lo que están viviendo fuera de la escuela, porque al escribir sólo para las tareas o los ejercicios, y sobre todo al escribir en computadora, se pierden muchas cosas valiosas”.
“Cada día es diferente, las emociones, los gusto, los intereses, todo cambia, y lo único que no cambia es la forma de educar a los niños en la escuela y eso se nota en la poca o nula capacidad de decisión de los chavos, y es que actualmente, los niños aprenden por imposición, no por gusto, no se les ha enseñado la variedad de opciones que tienen”, nos dice Carlos.
Está estructurado por días, y en cada día se le habla a los niños desde las emociones con preguntas que cambian al igual que cambian los días.
“¿Cómo me sentí hoy? ¿Qué fue lo que más me gustó?, son preguntas que logran estimularlo para que cuando escriba, no se sienta intimidado frente a una hoja en blanco”.
Cuando los niños escriben de sí mismos y no de la escuela, se dan cuenta de lo que les gusta de sí mismos, de que tienen logros valiosos o metas importantes, de esta manera, cuando lleguen a la adolescencia y se enfrentes a las preguntas: ¿Qué Quiero Estudiar? Y ¿Qué Quiero Hacer de Grande?, les será más sencillo y certero responderlas.
Un Día una Página puedes encontrarlo en las librerías Gandhi y en los pasillos de lectura que hay en las tiendas WalMart, un libro que vale la pena para acompañar a nuestros hijos de los 7 a los 12 años.
Soy Eduardo Álvarez, papá y periodista